Luis Pescetti y Jorge Maronna, cabeza de Les Luthiers, escriben CopyrightDe manera paródica, la novela retrata el ridículo y a un gobierno corrupto
CARLOS PAUL Con hilarante humor, la novela Copyright refleja el alto grado de ridículo al que puede llegar un hombre para seducir a una mujer, por detentar el poder o por no perder el que ya tiene. En la novela -escrita al alimón por Luis Pescetti, escritor y compositor de música para niños, y Jorge Maronna, guitarrista, compositor y fundador de Les Luthiers- se narran las peripecias de un desempleado sin imaginación que se hace pasar por escritor, plagiando descaradamente obras maestras de la literatura, con el único fin de llevarse a la cama a una hermosa mujer, que nunca ha tenido un orgasmo y es esposa de un mafioso que lo mismo trafica armas que chantajea al Papa, a un presidente corrupto o a un científico para que éste altere genéticamente el trigo y lo convierta en cocaína. El deseo sexual de cada personaje y el poder se conjugan en este "juego de apariencias", afirma Pescetti en entrevista. Quizá la palabra con la que se podría definir el libro es "carnaval, en el sentido de una inversión de valores y una mezcla y confusión de personajes". Aunque es una corrosiva parodia del "engolado acartonamiento intelectual y el ejercicio del poder", el texto "fue escrito a partir de sucesos de la vida real, de recuerdos y recortes de periódicos". En La Jornada, añade, por ejemplo, se publicaba Por mi madre bohemios, de Carlos Monsiváis, quien "retomaba las barbaridades que habían dicho de la manera más normal políticos o funcionarios. Era una delicia leer eso. Hicimos algo similar, llevando el recurso de la exageración hasta la exageración, para mostrar lo que pasa en la realidad y uno no puede creer". En un principio la idea fue combinar humor y literatura. Así, Lucas, quien copia de manera indiscriminada fragmentos de todos los libros que caen en sus manos, hace que convivan don Quijote y Gregorio Samsa, mientras el coronel Aureliano Buendía pasa junto a Justine, y Lady Chatterly trata de seducir a la cucaracha en que se ha transformado Samsa. Si el texto tiene una virtud, añade, sería la de jugar con la literatura y "juntar tantas anécdotas, en tan pocos personajes y en tan poco espacio". Publicada por Punto de Partida, en Copyright "todos los personajes son poco pudorosos, son descarnadamente abiertos en lo que desean y, cuando lo quieren ocultar, lo ocultan mal, lo que genera situaciones verdaderamente divertidas". Otro objetivo del libro, explica Pescetti, es "reflejar que los escándalos políticos se generan no porque se desconozca la corrupción o los abusos de los poderosos, sino porque éstos se hacen públicos. Existe un matiz entre el saber que existe la corrupción y el poder o querer sacarla a la luz". Copyright, concluye, "es una novela que de manera paródica desenmascara una realidad y, al contrario de lo que significa ese término, nos muestra a un gobierno corrupto que deja desprotegidas a las personas". |